AUTO DEL MES |
OCTUBRE 2007 |
"Les presentamos a Coco:
A
mediados de mayo del 2005, vendimos nuestro primer auto, un Renault 12
modelo 1975, el mismo que tuvimos durante seis años. Enseguida comenzamos la búsqueda
de un nuevo auto. Decidimos que sería un Ford, ya que soy un fanático de la
marca, debido a
que tuve un Ford Falcon de mi viejo durante veinte años. Con Gaby, mi señora
empezamos a leer los clasificados, a recorrer agencias, a llamar por teléfono a
particulares y caminamos todos los días durante tres largos meses, viendo cantidad de
autos que los avisos prometían impecables y carísimos, y nos desilusionábamos
al ver el estado deplorable que éstos presentaban.
Vimos distintos modelos de Ford y nos decidimos por el Ford Taunus. Cuando ya nos dábamos por vencidos, al no encontrar nada en condiciones, un día leyendo los avisos clasificados encontré este Taunus y lo fui a ver, ya sin muchas expectativas.
Pensaba que iba a ser una desilusión más, y grande fué la sorpresa cuando ví a "Coco" que estaba en la cochera de un edificio en el barrio de Flores. Fue amor a primera vista... ni bien lo ví.
Me dije: “Aca está... éste es mío”. Hablé con el dueño y volví a casa a buscar a mi esposa y a un amigo, para que lo vieran y me dieran su opinión... Fuimos enseguida y en ese mismo momento lo señamos. El 10 de agosto hicimos la transferencia y me lo traje a casa. Entonces mi señora empezó: “Vamos a hacernos Socios del Club del Taunus”.
Todos los días me pedía que la llevara pero yo no quería, hasta hacerle arreglar unos detalles de chapa y hacerlo pintar. Le cambié las llantas originales por unas nuevas dado que éstas estaban un poco oxidadas, lo llevé a hacer una afinación completa, cambio de aceite y filtro, le hice la primer prueba hidráulica de GNC ya que hacía cinco años que le habían colocado el equipo. Todo nos llevó tiempo y dinero hasta que en septiembre del 2006...
por fin, pudimos llevar a Coco al Club por primera vez y le dí el gusto a mi señora que durante todo el año me había insistido para que fuéramos.
Nuestra sorpresa fué más grande que la de haber encontrado a Coco, porque gracias a él encontramos también muchos buenos amigos con los que disfrutamos muchísimo todas las reuniones y salidas que compartimos. Gracias Coco y gracias Club Taunus Argentina.
Buenos Aires - Argentina l Club Taunus Argentina
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